Esta putita cheta de San Isidro se hace la fina y terminó siendo flor de petera viciosa de la pija que se va con cualquiera.

Esta flor de puta atorranta es una pendeja cheta que me levanté en un bar de la costanera de San Isidro el sábado pasado cuando fui a tomar algo con mis amigos. La mina se hacía la top frente a sus amigas pero bien que cuando me acerqué al toque se colgó a hablar conmigo de los bueyes perdidos, cosa de dejarme bien en claro que estaba regalada y lista para que me la llevara de ahí cuando se me cantaran las pelotas. Es así que al rato terminamos yendo a mi departamento y una vez ahí, la minita me demostró que no es una chetita si habilidades sino que lo que mejor le sale es hacer tiradas de goma como loca.