Esta pendeja calentona no paró de buscarme hasta que un buen día le terminé rompiendo el orto como ella tanto quería.

9:50 | Categorias: Rubias19
Descripción

En la fábrica donde laburo la hija del dueño se la pasa boludeando por la planta todos los putos días mientras nos muestra a todos lo parado que tiene el culito usando polleras cada vez más cortitas. Un buen día que yo estaba haciendo extras, así que no quedaba nadie en la fábrica salvo el sereno, la pendeja cayó de imprevisto preguntando por el padre. Esta vez se apareció con un vestido corto todo apretado que le marcaba hasta la raja del orto. No pude resistirme y la llevé hasta una oficina diciéndole que el viejo estaba ahí. Cuando llegamos, puse en bolas a la pibita mientras ella al principio quiso escarparse, y me la terminé cogiendo bien duro. La putita al toque aflojó con la negativa y hasta me pidió que le rompiera bien el orto paradito que tiene para sentir la pija de un verdadero macho adentro de ella.