Acababa de terminar de dar la clase de spining y decidí relajarle bien el culo a una de mis alumnas, cogiéndomela en el gym.
Descripción
Soy profe en una clase de spinning llena de chetas mal cogidas de San Isidro. Una de estas conchetas me venía provocando desde hacía un tiempo durante toda la clase. La puta me llamaba hasta su bicicleta con distintos pretextos, casi siempre boludos, con tal de que yo estuviera cerca de ella y la viera sudar mientras ella hacía los ejercicios. Esta vez aproveché que nos quedamos solos después de terminada la clase, y la flaca me dijo que tenía el culo todo duro de lo mucho que había pedaleado. Para relajárselo bien, le terminé rompiendo ese ojete hermoso y redondito, listo para ser garchado como se merece una atorranta tan zarpada como esta concheta de zona norte.